En estos momentos me encuentro en una fase de falsifición de morcillas, que, aunque es algo que me encanta (la morcilla, no falsificar), no la como tan a menudo como me gustaría porque me da “nosequé” el pensar en su contenido.
Desde que descubrí lo fácil y rápida que es esta receta, y que además tiene el mismo sabor, color y olor que la morcilla, y encima está hecha con berenjenas, se ha convertido en uno de mis platos favoritos…. otro más. Además se puede tomar como guarnición, sobre una tostada de pan, relleno de unos pimientos del piquillo.
Ingredientes:
100 gr. chalotas
300 gr. berenjenas sin pelar
50 gr. aceite de oliva
30 gr. de piñones
1 cucharada colmada de orégano
Sal y pimienta blanca
Preparación:
Poner las chalotas en el vaso y picar 3’’ vel. 4, y reservar. Elegir una berenjena de piel firme y sin imperfecciones. Cortarla con la piel en pedazos homogéneos, trocear 2’’, vel 5.
Añadir las chalotas y el resto de ingredientes, y programar 20’,Varoma, giro a la izquierda y vel. cuchara.
A la mitad del tiempo parar y bajar lo que haya quedado en las paredes.
Dejar escurrir en un colador, para que suelte todo el aceite.
Para hacer los paquetitos:
1 paquete de obleas para empanadillas La Cocinera.
1 yema de huevo
Colocar una cucharadita de la falsa morcilla en el centro de la oblea.
Doblar haciendo forma de paquetito.
Pintar la oblea con el huevo batido y meter en el horno precalentado a 200º durante unos 15’, o hasta que los paquetitos estén dorados. Servir espolvoreado de pimentón dulce y perejil.
Decorar con piñones.
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