Algunos portugueses dicen que en su país tienen una receta de bacalao para cada uno de los días del año, sin repetir, pero esos son los menos optimistas, porque a alguno le he oído decir que hay más de dos mil recetas distintas de bacalao, y se ha quedado tan ancho.
Lo que sí es cierto, es que nuestros vecinos portugueses, lo manejan de maravilla, y tienen formas de prepararlo bastante curiosas, pero todas ellas deliciosas, como este bacalhau as natas que hoy se me ha antojado.
La receta me la dio Jose, un amigo portugués, que es propietario de dos de los mejores restaurantes portugueses de Madrid, y donde sirve, naturalmente, no solamente este bacalao a las natas, sino un buen número de recetas, a cual más rica.
Yo me he permitido enriquecerlo a mi modo, y en cierta medida, facilitar su elaboración, que de por sí, no tiene demasiado misterio.
Ingredientes
- 1/2 kg. de bacalao fresco
- 200 gr. de gambas (pueden valer peladas)
- 1 brick de nata para cocinar
- 1 vaso de vino verde (o blanco)
- 1 bolsa de patatas fritas
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 2 huevos
- pan rallado
- 1 cucharada de Maizena
- 1/2 vaso de leche
- aceite de oliva virgen extra
- sal
Preparación
Limpiamos el bacalao, le quitamos la piel y las espinas, y lo cortamos en trozos menudos (también podríamos desmigarlo, pero está más rico en trocitos).
Pelamos las cebollas, las cortamos en juliana y las ponemos a pochar en tres cucharadas de aceite virgen extra con un pellizco de sal (cuidado con la sal porque, las patatas tienen su propia sal y el bacalao también). Cuando empiecen a estar transparentes, añadimos los ajos pelados y picados y el vaso de vino.
Dejamos que cueza un par de minutos y le incorporamos el bacalao y las gambas. Dejamos otro par de minutos y añadimos las patatas fritas desmigándolas un poquito. Podemos utilizar patatas fritas paja hechas en casa, pero el resultado no va a variar, y esto es mucho más cómodo y rápido.
A continuación le añadimos la nata y dejamos que cueza a fuego suave unos 10 minutos. Mientras tanto, echamos la leche en un bol con la Maizena y le damos vueltas para que se disuelva bien, lo incorporamos al bacalao, removemos y dejamos en el fuego hasta que haya reducido y espesado.
Volcamos todo en una cazuela de barro, o una tartera que aguante el horno, batimos los huevos y los esparcimos por encima. A continuación espolvoreamos el pan rallado y lo metemos en el horno en posición de grill a unos 200 grados, hasta que se tueste, que serán unos cinco a diez minutos.
Servimos en la misma cazuela, y podemos decorar con unas rodajas de aceitunas negras deshuesadas, que le van muy, pero que muy bien al bacalao en general. Y a chuparse los dedos. Os aseguro que esta receta es de 10 (en la foto falta mi ración, que ya me la he comido).
Recetas relacionadas:
No hay recetas relacionadas.