Ingredientes:
- 350 g. de lemon curd
- 400 ml. de nata para montar
- 100 ml. de leche
- 120 g. de azúcar
- 6-7 cookies con chips de chocolate
Preparación:
Lo primero que haremos será montar la nata con el azúcar. Reservamos
En un bol mezclamos el lemon curd con la leche y cuando esté bien mezclado le añadimos la nata montada, removemos con movimientos envolventes para que la nata no pierda el aire. Cuando tengamos la mezcla perfectamente unificada le añadimos las cookies en trocitos muy pequeños, y mezclamos.
Nuestra heladera nos pide que la mezcla lleve al menos 4 horas en el frigorífico antes de meterla en ella, de modo que la dejamos enfriar. Cuando hayan pasado las horas necesarias, metemos la mezcla en la heladera y la dejamos ahí hasta que el helado tome cuerpo, aproximadamente unos 40 minutos.
Luego lo vertimos sobre el recipiente donde lo vamos a congelar y metemos al congelador hasta el momento de servir.
Si lo vamos a hacer sin heladera, ponemos la mezcla en el recipiente donde lo vamos a congelar y lo metemos al congelador. Cada 30 minutos lo sacamos y lo removemos para que no se formen cristales de hielo y nos quede un helado cremoso, repetimos esta operaión unas 3-4 veces cada 30 minutos, luego ya lo dejamos congelar hasta el momento de servir.
El helado estaba buenísimo pero cuando lo vuelva a preparar quizás lo haga con galletas maría en lugar de las cookies de chocolate pues no me ha gustado demasiado el contraste del helado cremoso con los trocitos duros del chocolate, eso sí, que las galletas no le falten porque la mezcla es espectacular. Aún así es uno de los mejores helados que he preparado.