Hacer un caldo de verduras (cebolla, puerro, nabo, laurel, perejil, ajos) y jamón.
Freir las costillas de cerdo junto con el tomate.
Añadir el arroz, y rehogarlos unos minutos para que se ablande. Colocar las costillas y el arroz en un recipiente para horno.
Colocar los trozos de tomate natural desperdigados, y una cabeza de ajos en el centro.
Añadir ahora, el caldo resultante de la cocción de las verduras y el jamón. Al que habremos añadido colorante alimentario o azafrán.
También, añadiremos garbanzos de bote. Dejar en el horno, unos 45 minutos, hasta que el caldo se haya evaporado. Dejamos templar y a comer.