Souffllé de queso de cabra y cebollino

Este soufflé ha sido coser y cantar….facilísimo y rapidísimo, y además queda muy vistoso ..... Ya estoy deseando tener invitados para impresionarlos!!!!

Siempre he querido hacer soufflé, pero me daba miedo, de hecho, tengo un molde grande y unos ramequines comprados desde hace casi un año….preparados para este gran momento!!!!

Pero ahora que lo he hecho, no sé qué era lo que me daba tanto miedo ya que verdaderamente ha sido coser y cantar….facilísimo y rapidísimo, y además queda muy vistoso ….. Ya estoy deseando tener invitados para impresionarlos!!!!

Como solamente iba a comer yo el soufflé, hice solamente la mitad de los ingredientes que indicaba la receta (he puesto los ingredientes que utilicé entre paréntesis), y me ha salido cantidad suficiente para 4 ramequines de los que me he comido 2 junto con una rica ensalada con pimientos.

Aunque sin duda volveré hacer este soufflé muy pronto, le haría un par de modificaciones: La primera, el queso estaba demasiado fuerte, la próxima vez utilizaré queso Philadelphia para suavizarlo, y en vez de utilizar nata agría (que para mi gusto es demasiado agria) utilizaré nata de cocinar.

Además, aprovechando esta “incursión” en el mundo de los soufflés me han quedado ganas de probar los dulces, especialmente los de chocolate.

A pesar de tener la cámara preparada, el plato montado y decorado, y de que solo pasaron 30 segundos desde que saqué el soufflé del horno hasta que le saque la primera foto, se bajó muchísimo. Por lo que si tenéis visita, los invitados deben esperar sentados al soufflé, ya que el soufflé nunca esperará a los invitados y se desinflará. Para ver el Soufflé de Ana pincha aquí.

SOUFFLÉ DE QUESO DE CABRA (“Goat Cheese & Chive Soufflé” del libro “Essentials of Baking” de Williams-Sonoma)

INGREDIENTES

250 gr. queso de cabra (125 gr.)
60 gr. nata agria (30 gr.)
5 huevos grandes (3 huevos medianos)
1 cucharadita de mostaza
Sal, pimienta blanca y nuez moscada (al gusto)
Cebollino picado (al gusto)
1 cucharadita de cremor tártaro
Mantequilla y queso parmesano rallado para el molde

PREPARACIÓN

Precalentar el horno a 220º.
Untar el molde o los ramequines individuales con mantequilla y espolvorear con queso parmesano rallado.
Forrar el exterior de los ramequines con una tira de papel de hornear lo suficientemente larga para que rodee totalmente el borde, y lo suficientemente ancha para que supere unos 5 cm. desde el borde. Atar con un cordelito de cocina alrededor de los ramequines para que quede bien sujeto. Esto servirá para que el soufflé suba uniformemente.
Separar las yemas de las claras y montar estas últimas a punto de nieve junto con el cremor tártaro. Reservar.
Batir durante un par de minutos el queso de cabra, que tendremos preparado a temperatura ambiente, junto con las yemas, la nata agria, la sal, la pimienta y la nuez moscada, hasta que consigamos una mezcla uniforme y sin grumos. En el último momento añadir el cebollino picado.
Con una espátula de goma incorporar la cuarta parte de las claras a la mezcla del queso, con mucho cuidado y con movimientos envolventes. Continuar incorporando el resto de la mezcla hasta que no queden ningún resto de las claras.
Llenar cuidadosamente con una cuchara los ramequines hasta el borde, alisar la masa y espolvorear con un poco de queso parmesano.
Meter en el horno durante 8-10 minutos si son ramequines individuales y unos 25-30 minutos si es un molde grande.
No abrir la puerta del horno en ningún momento, ya que el soufflé se bajará.
Servir inmediatamente