Roscón de reyes casero con sorpresa

Esta receta la encontré por ahí hace tiempo, pero la he ido adaptando a mi modo. El resultado es magnífico, digno de cualquier pastelería. Le incorporé las típicas sorpresas dentro y una tarjetita que hice con la coplilla habitual.Espero que os gust

 Este roscón lleva masa madre y yo la dejo reposar de un día para otro, eso hace que el roscón esté mucho más esponjoso y dure un poquito más…aunque no creo que haga mucha falta…jejeje. Aquí os dejo como se hace.

Ingredientes

Para la masa madre:

  • 130 gr de harina de fuerza (yo uso la de mercadona).
  • 10 gr de levadura de panadería.
  • 70 gr de leche.
  • Una cucharilla de azúcar.

Resto de ingredientes:

  • 450 gr de harina de fuerza.
  • 20 gr de levadura de panadero.
  • 3 huevos (2 para la masa y 1 para barnizar).
  • 90 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 60 gr de leche.
  • Media cucharadita de sal.
  • Tres cucharadas de agua de azahar.
  • La piel de una naranja.
  • La piel de un limón.
  • 150 gr de azúcar.
  • 600 ml de nata para montar (muy fría se monta mejor).
  • Fruta escarchada o confitada.
  • Almendras en láminas o en cubitos.

 Para las sorpresas:

  • Un haba seca
  • Una figurita (yo uso la de los roscones anteriores que ido guardando, pero si no tenéis podéis usar cualquier otra cosita que tengáis).
  • Un poco de papel film.

Preparación

Para empezar, realizaremos la masa madre el día anterior mezclando todos sus ingredientes menos la levadura que incorporaremos al final disuelta en algo de leche. Amasaremos hasta que se mezcle bien y reservaremos en el frigorífico tapada con papel film hasta el día siguiente (entre 12 y 24 horas).

Al día siguiente pelamos la  naranja y el limón con cuidado de no pillar la parte blanca pues es amarga. Añadimos a las pieles los 150 gramos de azúcar y lo trituramos con la batidora. Reservamos.

A continuación en un bol vamos mezclando los dos huevos con la mantequilla, la leche, la sal, y el agua de azahar, a esta mezcla le incorporamos el azúcar que hemos batido anteriormente y seguimos mezclando. Añadimos el harina y la levadura y amasamos hasta que los ingredientes se mezclen bien. Por último, le incorporamos a esta mezcla la masa madre que tenemos reservada y amasamos hasta que quede una masa homogénea y que se despegue del bol. Reservamos tapada con un paño durante una hora hasta que crezca.

Pasado este tiempo es el momento de hacer nuestro roscón.

Preparamos la bandeja del horno con un papel de hornear. Nos mojamos las manos y cogemos la masa formando una bola lisa. La ponemos en el centro de la bandeja e introducimos dos dedos en el centro tirando con cuidado para ir formando el roscón. (Haced un agujero bastante grande pues cuando crece se queda más pequeño).

Una vez formado el roscón es el momento de adornarlo, y para ello utilizaremos nuestra imaginación y lo haremos como más nos guste. Primero, con la ayuda de un pincel de cocina, se pinta con el huevo abundantemente. Luego colocaremos la fruta (si es escarchada os aconsejo que la lavéis antes un poquitín pues si no se quema el azúcar en el horno), ponéis las almendras y si lo deseáis también podéis humedecer un poco de azúcar y ponerla también por encima, queda muy bien y añade algo más de dulzor para los golosos 🙂

Yo la he adornado con fruta confitada pero vosotros podéis hacerlo con lo que más os guste: fruta, frutos secos, orejones, ciruelas pasas, piña…lo bueno es que admite muchas variaciones.

Ahora viene la segunda fermentación. Lo dejaremos reposar en el lugar más cálido de la casa hasta que doble su volumen (hora o hora y media aproximadamente).

Precalentamos el horno a 200ºc y horneamos 25 o 30 minutos vigilando para que no se queme. Dejamos enfriar en una rejilla (la del horno vale).

Montamos la nata y azucaramos al gusto, cortamos el roscón y rellenamos con la nata (si lo hacéis con manga y una boquilla rizada quedará más bonito). Antes de poner la parte de arriba cogemos el haba y la figurita y la liamos en papel film. Las ponemos sobre la nata separándolas entre sí y ponemos la parte de arriba del roscón (sin trampas eh? jeje ).

Por último yo busqué una imagen bonita de los tres reyes magos y el texto que siempre suele venir y lo imprimí en una cartulina, no es necesario pero queda bonito, sobre todo si hay niños o visitas en casa 😉

Ya sólo nos queda disfrutar de este postre de reyes con el que sorprenderemos a más de uno.