Luleh Kebab liviano (a la criolla)

El Islam marcó a fuego la gastronomía de Arabia al prohibir el consumo de carne de cerdo y bebidas fermentadas. Este plato es un plato típico, pero argentinizado. Significa "carne a la parrilla" en persa, ¡Como para no hacerlo!

Los árabes eran quienes controlaban el intenso fructífero comercio de las especies y quienes las introdujeron en Europa mediterránea. Los lácteos, especialmente el yogurt, tienen un lugar de privilegio en la mesa y en su cultura. El cordero es el único animal cuya carne se consume, aunque los beduinos también comen carne de camello.
El plato original que les presento en este día es con carne de cordero, pero en Buenos Aires es muy difícil conseguirla y bastante cara, por eso opté por nuestras abundantes vaquitas y lo llamé “a la criolla”. La opción liviana no contiene grasas ni colesterol y aporta fibras, proteínas, calcio, fósforo, potasio y Vitamina C, brinda un ahorro de 200 calorías a la receta original.

Dedico este plato a mi abuela argentina hija de árabes y amante de su cocina. A ver si les gusta…

Ingredientes: (para 4 personas, rinde 24 unidades)
600 grs de carne magra
6 cucharadas de perejil picado
1 cebolla blanca
1 cucharadita de menta deshidratada
½ cucharadita de canela en polvo
½ cucharadita de mezcla de especies (o garam masala)
2 huevo
Sal, a gusto
Pimienta, a gusto
Pan rallado (si es necesario)
Rocío vegetal
12 Palos para brochetas cortados a la mitad (aproximadamente)

Salsa…
4 dientes de ajo
1 cucharadita de aceite de oliva
200 cc de yogurt natural – Ver post: "yogurt natural a mi manera" del día de ayer –
Sal, a gusto

Preparación:
La carne la pueden solicitar como corte magro en la carnicería y pedirle el favor al carnicero que se las pase por la máquina de picar. En mi caso, yo compro ofertas de carnes magras que da el Gobierno y las guardo en el freezer en trozos que voy utilizando de a poco. Luego, con un buen cuchillo desgraso y saco la mayor cantidad de nervios posibles a la carne para poder procesarla y no romper la máquina. La corto en cubos y la proceso bien chiquita. Queda súper roja y perfectamente magra.
Cortar la cebolla bien chiquita en pequeños cubos y colocarla en un bol junto con la carne, las especies, la menta, la canela, los huevos, la sal y la pimienta a gusto. Mezclar bien con la mano.
Formar óvalos como del tamaño de la mitad de una salchicha de Viena común y si no pueden hacerlos porque les quedó muy blanda la carne y se les pega en la mano los pasan superficialmente por pan rallado. Incrustan la mitad del palo para brochetas a lo largo de los Kebab y los cocinan sobre la plancha para bifes o una sartén ancha previamente rociada con rocío vegetal (si arman la parrilla para ellos mucho mejor!!). Los van rotando de lado para que se cocinen parejos.
Para la salsa, saltear los ajos cortados en pequeños cubos en el aceite de oliva y cuando están un poquito dorados incorporar el yogurt natural y salar un poquito nada más. Batir bien con la cuchara de madera mientras se caliente y servir en los platos sobre los Kebab.
Yo los acompañé con abundantes rúcalas a las que también condimenté por arriba con la salsa y una “onda” mediterránea de tomates secos previamente hidratados con agua, algunas aceitunas negra y pedacitos de queso Mar del Plata para compartir. Darse un gusto con un rico pan árabe y todos estos ingredientes dentro…mmm….que rico!

Un plato exquisito, sin palabras… Me sentí muy bien al hacerlo.