Deliciosas ya os lo digo ahora. Super suaves al paladar y con una salsita que quita el sentido. Vamos que las aficionadas a pringar pan como una servidora se pondrán morás. Ideales para ir acompañadas de un arroz en blanco, o unas patatitas fritas.
Ingredientes
- 600 gr de carne picada de ternera
- 1 huevo
- 100 gr de queso fresco
- 2 dientes de ajo
- perejil picado
- 2 cebollas
- 1 vaso de vino blanco
- harina
- aceite de oliva
- pimienta y sal
Preparación
Ponemos la carne picada en un bol, al que añadimos el huevo batido, una cabeza de ajo picadita, perejil al gusto, sal y pimienta. Dejamos tapado con papel film toda la noche, en la nevera.
Al día siguiente formamos las albóndigas y cortamos daditos pequeños para introducirlos en cada una de ellas. Pasamos por harina y las freímos en una sartén con un fondo de aceite de oliva. Las retiramos unas vez listas y las colocamos sobre papel absorbente para que pierdan el aceite que les sobra.
Picamos las cebollas y el ajo que nos queda, las rehogamos en una cazuela con un poquito de aceite durante unos 8 minutos. Añadimos luego una cucharada de harina y dejamos que se dore.
Seguidamente incorporamos el vino blanco y cuando se haya evaporado, vertemos agua hasta que quede una salsa no muy espesa, removemos.
Incorporamos las albóndigas y las cocemos tapadas a fuego lento unos 15-20 minutos. Removiendo de vez en cuando para que no se peguen. Una vez cocidas, dejamos reposar 5 minutitos y servimos.
Recetas relacionadas:









