Ingredientes: (para 4 personas):
- Aceite de oliva virgen
- 3 dientes de ajo
- 1 puñado de judías verdes
- 1 puñado de guisantes frescos
- 2 ó 3 tomates rojos, según tamaño
- 1/2 pimiento rojo no muy grande
- 1/2 Kg. de gambón fresco
- 1 lata de mejillones al natural
- 1 lata de almejas al natural
- 1 calamar, sepia ó un buen trozo de potón cortado en tiras
- Romero
- Azafrán (lo prefiero en lugar del colorante)
- Sal
- Arroz (faltaría más)
Preparación:
En una cacerola, pondremos a cocer los gambones frescos con agua suficiente para echarla luego al arroz.
Mientras se cuecen los gambones, calentar aceite en la paella, sin llegar a cubrir el fondo, a fuego alegre. Cortar los ajos, las judías, el pimiento y los tomates y darles algunas vueltas en la paella junto con los guisantes.
Añadir el calamar ó similar que hayamos escogido y voltear con el resto de verduras. Cuando hayan tomado un poco de color, colar bien el agua de los gambones y añadirlo a la paella hasta cubrir algo más de la mitad de su capacidad. Si sobra algo de agua, convendrá reservarla por si fuese necesario añadirla después. Entre tanto, pelaremos los gambones y los apartaremos para luego añadirlos.
Cuando comience a hervir de nuevo, añadir el azafrán, algo de romero y sal a gusto. Dejar hervir algunos minutos removiendo de vez en cuando.
Añadir los gambones ya pelados, y el contenido completo de las latas de mejillones y almejas, con su agua incluída. Remover un poco mientras hierve para mezclar bien todos los ingredientes.
Por último, añadiremos el arroz procurando repartirlo lo mejor posible por toda la paella y mezclando bien con el resto de ingredientes. Como medida, suelo utilizar unas 5 cucharadas soperas de arroz por cada comensal.
Cuando el arroz comience a asomar y quede poco líquido, probaremos un poco para ver el punto (por el color que va tomando el grano también se puede saber si está ó no en su punto). Si fuese necesario, añadir algo más del agua que sobró de los gambones procurando repartirla bien, por ejemplo, echándola con una cuchara. Cuando haya perdido prácticamente todo el agua en la superficie, apartar del fuego y dejar reposar unos minutos antes de servir.
Sugerencias:
Si tienes la oportunidad de preparar este mismo arroz en una barbacoa con unos troncos de encina a fuego vivo, el resultado es espectacular.
Para los más atrevidos, añadir un par de cayenitas partidas por la mitad antes de añadir el arroz para darle un toque picante, ofrece un resultado realmente asombroso.
Acompañar este arroz con un gazpacho bien frío, un buen vino blanco, rosado ó tinto y una simple ensalada mixta completan una comida excelente donde, sin duda alguna, el mejor ingrediente es la compañía con quienes la disfrutas.